La gente de todo el mundo ha estado bebiendo té durante miles de siglos, y por una buena razón. Numerosos estudios han demostrado que una variedad de tés pueden estimular su sistema inmunológico, combatir la inflamación e incluso prevenir el cáncer y las enfermedades cardíacas.
Si bien algunas cervezas brindan más ventajas para la salud que otras, existe mucha evidencia de que beber té con regularidad puede tener un impacto duradero en su bienestar.
Pon la tetera a hervir, porque compartimos algunos de los mayores beneficios ocultos en los tés más populares del mundo.
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1. Té blanco:
Conocido por tener un sabor delicado, el té blanco proviene de la planta Camellia sinensis que es originaria de China e India. También es la variedad de té menos procesada.
La investigación muestra que puede ser el té más eficaz para combatir diversas formas de cáncer gracias a su alto nivel de antioxidantes. El té blanco también puede ser bueno para los dientes, ya que contiene una gran fuente de flúor, catequinas y taninos que pueden fortalecer los dientes, combatir la placa y hacerlos más resistentes al ácido y al azúcar.
Esta variedad también ofrece la menor cantidad de cafeína, por lo que es una opción inteligente para los bebedores de té que desean evitar o limitar su consumo de cafeína.
2. Té herbal:
Los tés de hierbas, a veces llamados tisanas, son muy similares a los tés blancos, pero contienen una mezcla de hierbas, especias, frutas u otras plantas además de las hojas de té. Los tés de hierbas no contienen cafeína, por lo que son conocidos por sus propiedades calmantes.
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3. Té verde:
El té verde se origina en China, donde las hojas se procesan con calor mediante un método de cocción en sartén o tostado y en Japón, donde las hojas se cuecen al vapor con mayor frecuencia.
El té verde es excepcionalmente rico en flavonoides que pueden ayudar a mejorar la salud de su corazón al reducir el colesterol malo y la coagulación de la sangre.
4. Té negro:
El té negro se elabora con las hojas de la planta Camellia sinensis, la misma planta que se utiliza para hacer té verde. Sin embargo, las hojas se secan y fermentan, lo que le da al té negro un color más oscuro y un sabor más rico.
A diferencia de muchas otras variedades, el té negro tiene cafeína, por lo que es importante controlar su consumo. Cuando se sirve una taza de té negro, se beneficia de los flavonoides que combaten la inflamación y apoyan la función inmunológica saludable.
5. Té Oolong:
El té Oolong es una variedad de té tradicional chino que se elabora con la misma planta que se utiliza para hacer los tés verde y negro. La diferencia es cómo se procesa el té: no se permite que el té verde se oxide mucho, pero se permite que el té negro se oxide hasta que se vuelva negro. El té Oolong está en algún lugar entre los dos, por lo que está parcialmente oxidado. Esta oxidación parcial es responsable del color y sabor característico del té oolong.
¡Advertencias!
Se recomienda preguntar a tu médico de confianza, si puedes consumir estos alimentos, recuerda que todo en exceso puede generar alteraciones en el organismo, si llegas a presentar algún tipo de alergia al consumirlo, suspende de inmediato su consumo.
Si estas en embarazo o tienes una condición de salud, consulta a tu médico antes de consumir ciertos alimentos.
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