El jengibre se puede usar fresco, seco, en polvo o como aceite o jugo. Es un ingrediente muy común en las recetas. A veces se agrega a alimentos procesados y cosméticos.
El Anís es una planta milenaria, una planta aromática que tiene un montón de fines culinarios como medicinales. Generalmente se utiliza su aceite y su semilla, también son muy útiles la raíz y las hojas, sobre todo para los fines medicinales.
La gente de todo el mundo ha estado bebiendo té durante miles de siglos, y por una buena razón. Numerosos estudios han demostrado que una variedad de tés pueden estimular su sistema inmunológico, combatir la inflamación e incluso prevenir el cáncer y las enfermedades cardíacas.
El Té es un producto derivado de la Camellia sinensis, es usado como infusión o directamente como una medicina natural, el te contiene diferentes propiedades para mejorar la agilidad mental y el pensamiento, para perder peso y para el tratamiento de trastornos intestinales además de los dolores comunes de la cabeza o para la osteoporosis.
No hay duda que la manzana y la canela se llevan a la perfección, fundamentalmente porque son dos alimentos naturales cuyo sabor dulce (el de la manzana) y ligeramente picante (el de la canela) combinan sumamente bien. Tanto que es posible encontrarnos con una amplísima diversidad de postres maravillosos en los que nos encontramos con estos dos alimentos como ingredientes principales. Por poner en este caso solo un conocido y popular ejemplo, podemos mencionar la maravillosa tarta de manzana y canela, o el hojaldre de manzana y crema pastelera con canela.
¿Un tecito? Sí, pero que sea verde. Esto es lo que debes de responder cada vez que te ofrezcan una infusión, ya que investigadores de la Universidad Médica Militar en Chongqing, China, descubrieron que la bebida ayuda a generar nuevas células cerebrales relacionadas con la memoria y el mejor aprendizaje.
El té, que tantas propiedades beneficiosas tiene y que tanto nos gusta, se obtiene a partir de las hojas y yemas recolectadas de la planta Camellia sinensis. Dependiendo de cuándo se cosechen las hojas y brotes y del tratamiento al que se les someta, estaremos hablando de té verde, té rojo, té negro o té blanco.
Lo crea o no, el té helado constituye alrededor del 85% del té que se consume en varias ciudades. Si bien el encanto de una taza humeante de Earl Grey, no se puede negar que el té helado ha impregnado el mercado de bebidas de verano.